Ya se puede decir sin más dilaciones, este esta siendo el peor invierno de olas en muchos años, al menos en la zona de Levante.

Enero suele ser un mes en el que hay suficientes días de olas para llegar a cansarte de tanto mojar el neopreno y además con buen tamaño. Este año la crisis también parece habernos pasado factura en este aspecto y algunos ya llevamos practicamente un mes sin entrar al agua. Un mes de nervios, de continuas consultas de los partes meteorológicos, de conversaciones y suplicas de que entre algo de olas.

Atrás quedan esos inviernos de temporales y estado de emergencia, de lluvia y truenos, de sesiones con Gony, Jaji, Asier y otros profesionales de este mundillo, de Calita, de Placa y de trayectos de un lado a otro buscando siempre la mejor ola. Momentos que todo surfista ha tenido y sigue teniendo para difrutar de un buen baño, mientras el resto se queda en casa cerca del brasero.

Bien es cierto que ha habido algún día de poniente que ha traído algunas olas, pero nada comparado con aquello a lo que nos tienen acostumbrados los frentes de Levante.

El maldito frente de Oeste que lleva instaurado desde hace semanas no nos da tregua. Al menos queda la esperanza de que cuando vuelva el Levante, lo hará con fuerza y nos regalará buenas olas, como ya lo hizo en otras muchas ocasiones.

Ya se divisa algún síntoma de cambio. Esperemos que no nos haga esperar mucho.


Os dejo con un excelente corto de Aninocentfilms.com que reflexiona sobre el invierno y nos transporta al norte de España...