Los que rozamos los 20 años de edad recordamos poco o nada aquella fecha. La caída del muro nos pilló a algunos aun no nacidos o, como en mi caso, con a penas unos años de vida. Indiferentes ante el fin de un modelo y el de los años de tensiones continuas marcadas por la guerra fría, al mismo tiempo, comenzaba una nueva etapa para Europa.
Tras 20 años de la caída del muro de Berlin se puede comprender aun más la importancia que tuvo este hecho, no solo por la unificación de Alemania, sino también por los aires de mayor libertad que trajo al resto de Europa.
Si bien es cierto que las diferencias entre las dos Alemanias cada vez son menores, el Este y el Oeste siguen estando caracterizadas por algunas desigualdades. Ello lo muestran datos como la doble tasa de paro que sufre el Este o su baja productividad con respecto al Oeste (alrededor de un 20% más baja). Algunos expertos consideran que serán necesarios otros 10 años para ver a ambas latitudes en igualdad de condiciones, pero incluso sorprende que un motor económico como es Alemania vea como su "parte Este" siga manteniendo un desarrollo inferior al de otros países ex comunistas.
No hace falta tampoco trasladarse a Alemania para ver desigualdades entre territorios de un mismo Estado, aquí mismo en España nos podemos dar cuenta de ello. A diferencia, nuestros "muros" no son precisamente físicos.
Entonces ¿cuanto tiempo más debemos esperar para derribar esos muros?.
Probablemente todos tenemos alguno de estos en mente, tan solo falta algo de esfuerzo para hecharlos abajo.
Post a Comment